La empresa fabricante de coches Chrysler llamará a revisión a 1,4 millones de vehículos para instalarles un software con el objetivo de evitar que los hackers, como se llama a los piratas informáticos, tomen el control del motor, dirección y otros sistemas del vehículo.
El anuncio de la compañía llegó días después de enterarse de que investigadores de ciberseguridad usaron una conexión inalámbrica para apagar el motor de un coche Jeep Cherokee en funcionamiento, aumentando las preocupaciones sobre la seguridad de los coches con conexión a Internet.
Los investigadores usaron el sistema telemático de Chrysler para introducirse en el Jeep Cherokee de un voluntario y enviaron órdenes al motor, la dirección y los frenos hasta conseguir manipularlo.
La Administración Nacional de Seguridad de Tráfico en Carretera (NHTSA) ha dicho que investigará si actualizar el software del coche será suficiente para proteger a los usuarios de los piratas informáticos. Los fabricantes de automóviles han minimizado el peligro de que un pirata informático pueda controlar un vehículo usando una conexión inalámbrica.
Por otro lado, el grupo automovilístico italiano Fiat elevó su participación en Chrysler para sumar un 68,49% del capital en 2013.
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