Hace unos meses, en Estados Unidos se presentó una propuesta para hacer oficial la categoría “Factoryless Goods Producers”, que reconocería a las empresas que llevan a cabo sus labores de diseño, patentes y distribución en Estados Unidos y sin recurrir a la externalización, salvo para la producción. Ahora las autoridades han rechazado esta posibilidad.
Por el momento, la idea de crear una denominación especial para reconocer aquellas empresas que no recurren a la externalización para gran parte de sus actividades ha quedado suspendida. La idea del Gobierno es que entrara en vigor en 2017, pero la gran oposición demostrada durante el período de audiencia pública que finalizó hace un mes ha sido suficiente para paralizar esta iniciativa, al menos hasta que se realicen nuevos estudios.
Esta propuesta ha recibido más de 26.000 comentarios durante el período de audiencia pública, y hasta 40 miembros del Congreso y el Senado han presentado escritos con objeciones o pidiendo aclaraciones sobre la propuesta.
Gran parte de los opositores a esta reclasificación de las empresas han alegado que esta denominación distorsionaría datos económicos básicos y disfrazaría la deslocalización llevada a cabo por las empresas, inflando artificialmente la producción manufacturera en Estados Unidos.
A pesar de la gran oposición, esta proposición cuenta con numerosos apoyos ya que beneficiaría a empresas poderosas como Nike o Apple, por lo que no se ha abandonado la idea del todo, sino que se van a desarrollar nuevos estudios para ver el mejor modo de implantar esa reclasificación empresarial.
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