El Puerto de Motril (España) ha iniciado una nueva fase en el proyecto de construcción de las marquesinas fotovoltaicas y una nave de inspección de vehículos, al dar comienzo al hormigonado de las zapatas de cimentación.
La finalidad de esta iniciativa es optimizar la fluidez del tráfico de pasajeros y mercancías con el norte de Marruecos, impulsando así la competitividad de las compañías que se encuentran en la zona. De modo que, los trabajos supondrán la unión y mejora de la seguridad en los accesos a los muelles.
Concretamente, las marquesinas fotovoltaicas se implantarán en los viales de manera que encajen arquitectónicamente con el entorno y los edificios cercanos. Teniendo una superficie de aproximadamente 3.000 m² y 738 módulos fotovoltaicos, estas estructuras metálicas tipo pórtico producirán energía sostenible con una potencia pico de 295 kilovatios.
Asimismo, se procederá a construir las estructuras portantes, la instalación de los módulos solares y se integrarán instalaciones auxiliares para las fuerzas de seguridad encargadas del control de acceso a los buques. El objetivo del enclave andaluz es transformar el puerto en un referente de sostenibilidad, para lo cual planea electrificar los muelles, facilitar la recarga de vehículos eléctricos, los controles medioambientales y el proyecto Ecopuertos.
Además de esta iniciativa, cabe mencionar que la Autoridad Portuaria de Motril espera recibir un total de 18.924 viajeros a bordo de 23 cruceros durante este 2023, a los cuales se unen unos 8.937 tripulantes. De ser así, el enclave andaluz reportará los datos más altos de los últimos cuatro años y casi triplicará los de la última campaña.
