El Puerto de Tarragona (España) recibió el dique flotante Mar del Aneto el pasado jueves 20 de febrero, el cual ha construido FCC en el año 2002. Gracias a este elemento, la Autoridad Portuaria avanzará en la construcción de los cimientos de hormigón del nuevo Muelle Baleares, cuyo coste asciende a 27,3 millones de euros.
El objetivo del enclave tarraconense es extender en cuatro hectáreas el espacio para la operativa de cruceros. Las plataformas se emplean en los puertos para la fabricación de muelles, diques y otras infraestructuras relacionadas con la actividad portuaria. En concreto, la estructura cuenta con una eslora de 46,8 metros, una manga de 25 metros y un puntal de 28 metros.
El dique Mar del Aneto es capaz de fabricar cada uno de los cajones en un período de entre siete y diez días, que en el caso del enclave barcelonés se trata de un dique con 41,85 metros de eslora, 16,75 metros de manga y 21,30 metros de puntal. Por su parte, la construcción del Muelle Baleares incrementará la línea de atraque en 700 metros y ofrecerá una operativa más cómoda y ágil.
Gracias a esta medida, la Autoridad Portuaria podrá acceder a nuevas oportunidades para la temporada de cruceros de 2021. Se estima que la construcción dure unos 18 meses, aunque la adjudicación se ha realizado por un importe inferior al inicial y también con un plazo más ajustado, que se ha situado en 14 meses.
No se trata del único proyecto que el embarcadero tiene en mira, sino que el Puerto de Tarragona está determinando los últimos aspectos del modelo de gestión de su Zona de Actividades Logísticas (ZAL), el cual se ubica en Vila-Seca. Se trata de una iniciativa que cuenta con una zona de 92 hectáreas, cuya inversión asciende a los 70 millones de euros, que se licitará en tres frases.
