Estados Unidos ha suspendido la imposición de 150.000 millones de dólares en aranceles a productos chinos, al menos mientras continúan las negociaciones para reducir el déficit comercial estadounidense respecto a Pekín.
Según los expertos, esta medida frena los temores de una inminente guerra comercial con China. Al respecto, el secretario del Tesoro de EE.UU., Steven Mnuchin, anunció que su Gobierno ha accedido a suspender los aranceles como parte de un consenso alcanzado con China, por el que ese país se compromete a aumentar sus compras de productos estadounidenses.
“Estamos poniendo en suspenso la guerra comercial”, dijo Mnuchin en una entrevista con la cadena de televisión Fox News.
Según el funcionario, “hemos acordado poner en suspenso los aranceles mientras ejecutamos el acuerdo marco” comercial y subrayó que esas tarifas “siempre pueden volver a imponerse” si fracasan las conversaciones con Pekín.
En concreto, Mnuchin precisó que se refería a los aranceles por 150.000 millones de dólares a cientos de productos chinos que el presidente estadounidense, Donald Trump, amenazó con imponer por temas de propiedad intelectual y para forzar a Pekín a equilibrar la balanza de pagos.
La suspensión llega días antes de que se completara el proceso para imponer esos aranceles a un primer tramo de productos chinos por valor de 50.000 millones, lo que probablemente habría llevado a Pekín a responder con sus propias barreras comerciales a productos agropecuarios estadounidenses.
Además, Mnuchin aseguró hoy que el secretario de Comercio de EE.UU., Wilbur Ross, visitará pronto China con una delegación para concretar los detalles del acuerdo por el que Pekín se compromete a aumentar sus compras de productos agrícolas y energéticos estadounidenses.
