Los puertos de Los Ángeles y de Long Beach, en California (EE.UU.) aplicarán tarifas adicionales a los contenedores que se mantengan más tiempo del necesario en los almacenes, en un esfuerzo por mejorar el movimiento de carga interno.
Es una de las medidas implementadas en medio de la congestión y el volumen récord en ambos puertos, que comparten la bahía de San Pedro, en la costa oeste de Estados Unidos.
Según la nueva política, que los puertos explicaron en una nota, cobrarán a los transportistas marítimos por cada contenedor de importación que pertenezca a alguna de dos categorías.
La primera es para los contenedores programados para moverse por camión. Se cobrará a los transportistas marítimos por cada contenedor que resida nueve días o más.
La segunda categoría es para los contenedores que se mueven por ferrocarril, a los que se aplicará a las navieras si ha permanecido durante tres días o más.
De acuerdo con un comunicado emitido por ambos puertos residentes en la Bahía de San Pedro, a partir del 1 de noviembre cobrarán a los transportistas marítimos 100 dólares por contenedor en esas 2 categorías, incrementando a 100 dólares por contenedor por día.
La gerencia justificó que hoy en día los tiempos de estadía de contenedores han crecido al mismo ritmo de las importaciones. Antes los de entrega local permanecían cuatro días en los almacenes, y los de ferrocarril dos días.
Esos retrasos dificultan el despeje de la carga de las terminales y el anclaje de los barcos.