El Gobierno de Bolivia y la Organización de Naciones Unidas (ONU) llegaron a un acuerdo complementario para la cooperación que permitirá la canalización de 187 millones de dólares para cuatro áreas de desarrollo prioritarias del país.
En concreto, el Convenio Marco de Complementariedad de Naciones Unidas para el Vivir Bien 2018-2022 (UDAF) es una estrategia para canalizar recursos técnicos, humanos y financieros de esa organización para apalancar financiación local e internacional.
Según el gobierno del país latinoamericano, las cuatro áreas en las que las agencias de las Naciones Unidas ofrecerán un valor agregado son el desarrollo social inclusivo, desarrollo integral y economía plural, gestión pública y justicia plural e interculturalidad, descolonización y despratriarcalización.
En este sentido, las 23 agencias de Naciones Unidas, de las que 15 residen en Bolivia y ocho son no residentes, se comprometen a ofrecer apoyo técnico para hacer que siga creciendo la calidad de vida en el país andino.
Los promotores del acuerdo explicaron que el UDAF cubrirá un período de cinco años de 2018 a 2022 y tomará en cuenta los principales desafíos de desarrollo de Bolivia plasmados en el Plan de Desarrollo Económico y Social 2016-2020 y en los pilares de la denominada Agenda Patriótica 2025.
Mauricio Ramírez, Coordinador Residente del Sistema de Naciones Unidas en Bolivia, y Mariana Prado, ministra de Planificación, firmaron el acuerdo marco en un acto en presencia del presidente Evo Morales.