La pandemia de coronavirus ha impulsado con creces el comercio electrónico, hasta el punto de que las principales compañías del mundo comercial han estimado que el tráfico online formará casi la mitad de sus ventas a finales de año, según indica un estudio reciente de Geodis y Accenture.
De hecho, el 65% de las ventas se han llevado a cabo a través del canal online durante la pandemia. Concretamente, un 38% de los consumidores se han decantado por los marketplaces, mientras que otro 27% se ha dirigido a las tiendas online de las marcas.
No obstante, un 52% de las compañías consideran que su potencial comercio electrónico se ve limitado por sus capacidades logísticas. En este punto, un 59% de las compañías europeas emplean marketplaces para vender sus artículos online y así compensar la falta de recursos e infraestructuras logísticas.
Aún así, la mayoría de las firmas encuestadas afirman que la dependencia en exceso de marketplaces no es sostenible, por lo que quieren dar más peso a sus propios canales de comercio electrónico. Para mejorar esta situación, un 5% de las compañías europeas encuestadas quieren vender directamente a los consumidores a través de sus propios sitios web, para poder obtener el 20% de sus ventas totales.
Por otro lado, la fusión del comercio físico y digital enriquecen con creces la experiencia de compra, ayudando a que los consumidores estén más seguros de sus compras. Por ejemplo, el 55,8% de los consumidores recurre a su móvil en las tiendas físicas para comparar los precios ‘on-line’ de los productos que piensan comprar, mientras que un 34,2% se dedica a hacer fotos de ofertas y publicidad, según indica el estudio ‘El futuro de los pagos 2020‘, realizado por UniversalPay.
