Los nuevos A350-1000 de Virgin Atlantic ofrece una cabina casi tan exclusiva como la de primera clase para business, con detalles de lujo, un confortable salón lounge, asientos de mayor tamaño y amenities personalizadas.
Virgin invirtió casi 3.500 millones de euros en adquirir 12 de los nuevos A350-1000, cuyas primeras unidades llegarán este verano.
Los cambios presentados preceden a los anunciados por British Airways, que llevan a que el corredor del Atlántico Norte sea el escaparate de las comodidades en la clase business.
Esta estrategia se contrapone a la de otras compañías que prefieren apostar por tarifas de bajo coste y servicios básicos en las rutas transatlánticas para hacer frente a la fuerte competencia de las low cost, un modelo de negocio que ya dejó varias aerolíneas caídas en el camino.
El salón lounge, llamado El Loft, es un espacio reservado para la clase superior, donde ocho personas pueden ir cómodamente sentadas en asientos bajos. También hay un pequeño espacio donde dos pasajeros pueden sentarse y trabajar con sus ordenadores. Allí sirven bebidas y comidas.
Esta sensación se refuerza con la presencia de una pantalla de 32 pulgadas donde se pueden ver películas o eventos deportivos. Para no molestar al resto de los pasajeros los que quieran esta opción televisiva pueden escucharla por auriculares con Bluetooth.
Esta zona posee 44 plazas dispuestas en una distribución en forma de espiga de 1-2-1, con lo que todas tienen salidas al pasillo.