La Asociación de Navieros Españoles (Anave) ha abordado el reto de las emisiones contaminantes para el sector marítimo. Debido a que el cambio de la regulación del transporte de contenedores se efectuará el próximo mes de enero, las navieras deben realizar una profunda transformación que afecta a un sector inmerso en una etapa llena de incertidumbres.
Con el objetivo de ayudar a las compañías implicadas que realizarán un sinnúmero de inversiones para apoyar el cambio, Anave ha publicado un documento con el título ‘Preguntas y respuestas sobre emisiones a la atmósfera del transporte marítimo’, el cual indica cómo aplicar el nuevo límite de azufre de la Organización Marítima Internacional.
En concreto, el informe especifica las diferencias existentes entre los gases contaminantes, sobre todo entre el óxido de azufre y el nitrógeno, así como los gases de efecto invernadero. De esta manera, la compañía evalúa qué efecto produce el uso de dichos combustibles en la calidad del aire y del medio ambiente.
De hecho, Anave estima que las emisiones del transporte marítimo suponen menos del 2,4% de las emisiones totales de GEI generadas por el hombre. Es más, el transporte marítimo emite unas seis veces menos CO2 por tonelada en kilómetro recorrido, en comparación con la actividad del transporte por carretera. Asimismo, el transporte marítimo expulsa unas 60 veces menos CO2, que el transporte aéreo.
Para garantizar un sistema de distribución menos contaminante, las compañías deben adoptar soluciones logísticas más respetuosas con el medioambiente. Por ejemplo, el proveedor de soluciones de carga Kalmar ha lanzado el primer sistema de código abierto para la automatización de las terminales de contenedores.
