El Grupo GLS ha presentado su nueva herramienta de devoluciones ShopReturnService para el comercio electrónico internacional. Se trata de un sistema diseñado para aquellos negocios que venden sus artículos en varios países. En caso de que el destinatario quiera devolver el artículo, puede llevar el paquete a un ParcelShop para que el mismo operador se encargue de devolverlo al remitente.
En este caso, el remitente tendrá que enviar al comprador una etiqueta de devolución para que el destinatario la coloque en el paquete. El servicio está disponible en España y sólo añadirá costes adicionales si se produce la devolución y permite un seguimiento continuo del proceso.
El operador se ha estado dedicando a mejorar la expansión de su red europea durante este año, inaugurando más de 20 centros y aumentado la capacidad de los almacenes ya existentes en los hubs de Barcelona, Budapest, Essen y Poznan.
Respecto al territorio español, la compañía ha aumentado un 70% su capacidad en Benavente y un 80% en Sevilla, en comparación con los espacios logísticos anteriores. Es más, la firma ha abierto un nuevo centro de operaciones en Coslada, con más de 7.700 m².
Por otro lado, la firma estima que movilizará entre un 30% y un 40% más de mercancías durante los meses de otoño y la campaña de Navidad. De modo que, GLS ha contratado a más de 2.500 empleados y se han integrado 6.500 furgonetas de reparto y vehículos de larga distancia.
Las compañías de reparto no sólo deben velar por la rapidez de los envíos, sino que deben tener en cuenta que los consumidores europeos siguen teniendo la misma opinión en cuanto a los envasados. Y es que, la mayoría prefiere un envasado más respetuoso con el medioambiente, según indica el estudio realizado por la compañía de envasados DS Smith.