La Autoridad de Seguridad Marítima de Australia (AMSA) ha retenido el buque granelero MV Apellis, de bandera panameña, después de que una inspección haya revelado deficiencias en el respeto a los derechos laborales de la tripulación.
La Federación Internacional de Trabajadores Marítimos presentó una denuncia contra el buque que dio lugar a la inspección del mismo en aguas australianas. Los inspectores que subieron a bordo del buque descubrieron que los trabajadores no habían cobrado sus salarios y que la comida que llevaba el buque a bordo para abastecer a su tripulación era de calidad inadecuada y no tenía el valor nutricional suficiente.
Allan Schwartz, gerente general de AMSA, ha destacado que el tratamiento de la tripulación debe ser tan importante como el adecuado mantenimiento de los buques ya que un fallo en el sistema técnico o en el sistema humano puede causar graves accidentes.
Responsables de AMSA han manifestado que el buque continuará retenido hasta que se rectifiquen las deficiencias detectadas.
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