La Comunidad Autónoma de Cantabria ha suprimido íntegramente el impuesto autonómico sobre los carburantes (más conocido como ‘céntimo sanitario’) desde el 1 de enero de 2015. Del mismo modo, Castilla y León ha rebajado casi un 70% este impuesto, pasando de 4,8 céntimos por litro a 1,6 céntimos.
Entre los motivos aducidos para adoptar dicha decisión se encuentra la situación de desventaja competitiva en que se encontraban ambas Comunidades frente a otras regiones limítrofes en las que no se aplicaba dicho impuesto, en concreto País Vasco, La Rioja, Aragón y Navarra; que decidió eliminar el impuesto desde 2014 y que comenzó a devolver las cantidades reclamadas por el céntimo sanitario a principios de diciembre.
La Federación Nacional de Asociaciones de Transportistas de España (Fenadismer) ha valorado muy positivamente ambas decisiones adoptadas respecto a los gravámenes anteriormente existentes sobre los carburantes consumidos en dichas regiones.
Fenadismer ha venido manifestando reiteradamente su rechazo al establecimiento de dicho recargo autonómico que supone hasta 4,8 céntimos por litro de carburante consumido. Fenadismer alega que el céntimo sanitario crea distorsiones en la competencia a las empresas transportistas, las cuales tratan de evitar la aplicación de dicho impuesto repostando en estaciones de servicio situadas en las regiones donde no se aplica el mismo.
Ello conlleva para las regiones donde existe el recargo autonómico consecuencias negativas no sólo para las estaciones de servicio allí ubicadas, que ven reducidas de forma importante las ventas de carburantes, sino también para las propias arcas autonómicas, las cuales lejos de recaudar dicho recargo autonómico de hasta 4,8 céntimos por litro, dejan de recibir del Estado el 58% del impuesto estatal de hidrocarburos (esto es, más de 19 céntimos por litro en el caso del gasóleo) que le corresponde a cada Comunidad Autónoma en virtud de lo establecido en la vigente Ley de Financiación de las Comunidades Autónomas.
Por ello, Fenadismer anima al resto de Comunidades Autónomas que aún tienen establecido el recargo autonómico sobre los carburantes que sigan el ejemplo de las cinco Comunidades Autónomas, además de Canarias, que en la actualidad no lo aplican.
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