Alemania, Francia, Portugal y España han llegado a un acuerdo para acortar las rutas aéreas a fin de evitar desvíos por las fronteras entre países. El objetivo de las negociaciones es alcanzar una gestión del tráfico aéreo más segura, sostenible y eficiente.
El acuerdo se ha materializado a través de las empresas que gestionan la navegación aérea en ruta en los siguientes países; Navegación Aérea Española (Enaire), Navegación Aérea de Portugal (NAV), Dirección de Servicios de Navegación Aérea Francesa (DSNA) y Control Aéreo de Alemania (DFS), que han establecido un grupo de trabajo para analizar y optimizar las rutas directas de largo alcance.
El grupo de expertos ha modificado las rutas a través del espacio aéreo de los centros de control de Madrid, Lisboa, Brest y Karlsruhe. Los gestores europeos permitirán a los pilotos y a las aerolíneas que realicen rutas más directas independientemente de las fronteras nacionales.
El acuerdo reportará beneficios para los usuarios como el aumento de la calidad del servicio o un menor tiempo de viaje. Por otro lado, las compañías aéreas verán reducido su gasto de combustible y bajarán los costes operativos.
En este sentido, el precio de las tarifas aéreas ha bajado en Estados Unidos. El promedio de un pasaje aéreo doméstico ha disminuido un 6,2% respecto a 2014, hasta ubicarse en 372 dólares (334 euros) en el tercer trimestre de 2015, según el Departamento de Transporte de Estados Unidos.
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