No sólo España necesita multiplicar hasta por 100 su cantidad de puntos de recarga actuales para coches eléctricos, sino que además las autoridades deberán asegurarse de que el coste de acceder a estas recargas para los ciudadanos nacionales, sea más bajo que hasta el momento.
Como decíamos, amén de que los procesos de carga para vehículos eléctricos son lentos y muchas veces molestos, uno de los principales inconvenientes que plantean es su coste, que de hecho coloca a España entre los 10 países en los que más cuesta recargar un coche de este tipo.
Si tenemos en cuenta que una de las supuestas ventajas del uso de medios de transporte respetuosos con el ambiente es el ahorro de dinero que podemos llegar a conseguir reemplazando los motores a combustión por baterías, está claro que no debería dolernos el bolsillo al cargar nuestros coches.
En España, al menos hasta ahora, no hay una respuesta a esta problemática, que se agudiza cuando prestamos atención a estudios como por ejemplo los de Compare the Market, consultora que ha medido el coste de cargar un vehículo eléctrico en varios de los países donde existen estas soluciones.
Para ello, apostando por una batería de 100 kwh de un Tesla Model S, llegaron a la conclusión de que el país más barato para cargar coches eléctricos es Chile, con un valor de 0,06 euros por kwh, y por ende, de 6,23 euros para tener la autonomía completa.
¿Y qué ocurre en España? Aquí realizar una carga completa de 100Kw cuesta 21,36 euros, dado que el precio por kwh es de 0,21 euros. Y si bien estamos lejos de Dinamarca, el país “más costoso” de este listado, no quedan dudas de que los españoles aún gastamos demasiado en recargar nuestros coches eléctricos.
