Si el aeropuerto de Barcelona suele estar entre los de mayor cantidad de retrasos en circunstancias normales, estaba claro que las protestas por las sentencias condenatorias de varios líderes independentistas de esta semana causarían aún más inconvenientes a los pasajeros que lleguen, o se vayan, de la ciudad.
De acuerdo a diferentes medios informativos, un total de 108 vuelos tuvieron que ser cancelados en las últimas horas en la capital catalana debido a la presencia de manifestantes, algo que también ocurrió con servicios complementarios como el tren de alta velocidad en la ciudad de Girona.
Si a eso le sumamos los cortes en la carretera N-II a su paso por Mataró y la C-65 en Cassà de la Selva, queda claro que los turistas y residentes locales que intentaban arribar o marcharse de Barcelona se han encontrado con toda clase de inconvenientes para seguir su rutina.
Luego de que el referéndum de autodeterminación que tuvo lugar el 1 de octubre de 2017 fuera declarado inconstitucional por el Tribunal Constitucional español, y una docena de referentes políticos del Parlamento regional fueran condenados, cerca de 8.000 manifestantes llegaron al aeropuerto de Barcelona-El Prat para mostrar sus descontento, generando todo tipo de problemáticas a la autoridad aeroportuaria.
Se espera que en los próximos días la situación tienda hacia la normalidad, aunque una enorme cantidad de vuelos han debido ser desviados hacia otros aeropuertos cercanos, reprogramados para las siguientes horas o directamente cancelados, según representantes de las compañías aéreas.
