Gracias a un grupo de investigadores de las Universidades de Cantabria y Castilla-La Mancha se ha podido diseñar un sistema que ahorraría “un 40%” de la inversión. Consiste en un método que calcula los horarios y velocidades a los que deberían circular los trenes de alta velocidad para evitar que se construya todo el trazado en doble vía y esta se alterne con tramos de vía simple.
De la mano del director de este equipo de trabajo y catedrático de la Escuela Técnica Superior de Ingeniería de Caminos, Canales y Puertos de la Universidad de Cantabria, Enrique Castillo Ron, se ha presentado este miércoles en A Coruña el sistema.
Castillo ha explicado que es una idea “muy simple”. Su propuesta es alternar la vía doble con la simple sin reducir la seguridad y sin que suponga alargar el tiempo de viaje. La idea es aplicable a todas las vías periféricas en las que circule menos de un tren por hora y este es el caso, ha sostenido, de todas las estatales, tanto la gallega, como la asturiana o la cántabra. El ahorro que estiman es del 40% de la inversión, lo que se traduce en “mucho dinero” que se podría destinar a líneas de alta velocidad en otras comunidades o a otras infraestructuras o servicios.
Los investigadores han desarrollado una “compleja” herramienta informática que calcula los horarios, la velocidad y las paradas que deberían realizar los trenes, de forma que los cruces entre los que se dirigen, en el caso de Galicia, a la Meseta y los que vienen de Madrid se crucen en zonas en la que es más barato construir, que son las llanas y abiertas. De este modo, en estas áreas habría doble vía, pero en las partes del trazado en las que la construcción es cara (túneles y viaductos) habría vía simple.
El modelo ha levantado el interés de algunos gobiernos autonómicos y no tendrían inconveniente en exponerlo a los responsables de la Xunta. “Nosotros somos los ingenieros, damos las soluciones, pero no nos corresponde la decisión política”, ha señalado.
Deje un comentario