Seopan, la patronal de grandes constructoras, estima que el Estado español deberá afrontar un coste de en torno a 5.000 millones de euros si liquidase las autopistas de peaje que a día de hoy están en riesgo de quebrar. Además, Seopan advierte de que se produciría un enfrentamiento judicial durante varios años entre el Gobierno y las principales empresas del sector, que reclamarían más de 2.300 millones de euros.
Por otra parte, la patronal constructora señala que la liquidación de las vías dañaría la imagen de España “ante la inseguridad jurídica que generaría”, además de impedir las inversiones privadas para promocionar infraestructuras.
Por ello, Seopan considera que la “mejor opción para el interés general” consiste en integrar la docena de carreteras en cuestión dentro de una sociedad pública de autopistas, incluso aunque se tratara de una sociedad con capital estatal.
Julián Núñez, presidente de Seopan, confía en que el Gobierno exponga una solución para estas infraestructuras en menos de un mes. Además, esta patronal advierte de que las concesionarias de las vías ya han asumido la pérdida de 1.800 millones de euros derivados dela problemática con las autopistas, de modo que la creación de una empresa nacional de autopistas no supondría un rescate.
El pasado mes de febrero, el Gobierno de España ya comentó que estaba considerando la liquidación de las autopistas en concurso de acreedores de forma “ordenada”. La resolución se tomaría en caso de que esta solución tuviera menos coste para las cuentas públicas que rescatar las autopistas a través de la constitución de una empresa pública de autopistas.
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