La Autoridad Portuaria de Ferrol-San Cibrao ha cerrado el primer trimestre del año con un descenso del 18,36% en su volumen de tráfico, registrando un total de 1.447.575 toneladas movidas. La principal causa de esta bajada ha sido la drástica reducción en la manipulación de carbón, tradicionalmente uno de los principales motores del puerto, que apenas ha alcanzado las 46.775 toneladas en lo que va de año.
Los graneles sólidos han sido el segmento más afectado, con cerca de 757.000 toneladas manipuladas, lo que supone 69.000 menos que en el mismo periodo de 2024. Sin embargo, el impacto negativo ha sido parcialmente compensado por el buen comportamiento de los graneles líquidos, que han crecido un 9,39%, alcanzando las 530.567 toneladas, gracias sobre todo al fuerte aumento del tráfico de GNL (gas natural licuado), que ha experimentado un incremento del 21,09%.
Por otro lado, la actividad en la terminal de contenedores operada por Yilport también ha mostrado signos positivos. Hasta el 31 de marzo, se movieron 38.834 toneladas de mercancías en contenedor, un 32,43% más que el año anterior. En términos de TEUs, el crecimiento ha sido del 40,67%, con algo más de 4.000 unidades registradas. Estos datos apuntan a una reconfiguración del tráfico portuario, donde nuevos sectores comienzan a ganar protagonismo ante el declive del carbón.
Por lo que respecta a la mercancía general, se ha mantenido estable, en parámetros muy similares al del ejercicio pasado. En total, se han registrado 160.079 toneladas en los tres primeros meses del 2025, frente a las 162.548 del mismo período del 2024.