El autobús de Madrid ya dio muestras de su interés por aprovechar las nuevas tecnologías cuando, desde comienzos de este año, permitió que los pasajeros pudieran pagar sus boletos mediante la utilización de tarjetas o el móvil, facilitándoles la labor.
Ahora, los encargados de uno de los principales medios de la capital, han anunciado en el marco de la Semana de la Movilidad, una iniciativa que tiene como objetivo que los pasajeros puedan realizar pagos biométricos al subirse a estas unidades.
El piloto, liderado por la empresa británica Saffe, y que cuenta además con el apoyo de Banco Santander, Mastercard, la Empresa Muncipial de Transportes -EMT- de Madrid y el visto bueno del Ayuntamiento de Madrid, podrá implementarse de forma definitiva recién en un par de años.
André Coelho, fundador de esta compañía de pagos, ha explicado que “la intención es poner todo esto en la red de trenes y metro” aunque “para el metro se necesitaría una potencia de red mucho más amplia” y por eso comenzarán con los autobuses, analizando los resultados de las pruebas iniciales.
¿Cómo funcionará este nuevo método de pago? Básicamente, registrando nuestras caras y datos de pago en la aplicación de la EMT y luego, una vez que subamos a los autobuses, enseñando el rostro a las máquinas especialmente adaptadas para ello. Con sólo una mirada, el pago estará hecho.
Paz López, directora de Madrid In Motion, ha señalado por su parte que este proyecto “implica una coordinación para la integración con el servicio de EMT, que se ha prestado plenamente al sistema”, y que confían en que la iniciativa continúe aunque cambien los partidos políticos que regulan el transporte.
