La Autoridad Portuaria de Valencia (España) aportará una mayor sostenibilidad y crecimiento a su nueva terminal norte, la cual se posicionará como la más avanzada en términos medioambientales del mundo. El espacio estará totalmente electrificado y reducirá las emisiones de CO2 con el suministro eléctrico a buques.
Esta infraestructura es muy necesaria debido a que el comercio internacional continuará su línea de crecimiento y seguirán existiendo las operaciones comerciales, siendo el transporte marítimo el canal más competitivo y eficiente medioambientalmente.
La nueva instalación es esencial, ya que el enclave valenciano ha alcanzado el 73% de su ocupación máxima, y continúa con la idea de seguir siendo un puerto hub de mucho tráfico. Y es que, no es el único que apuesta por este ideal, sino que hay inversores que quieren apostar por esta infraestructura.
En cuanto la terminal norte esté en funcionamiento, se espera que la actividad económica del puerto se duplique, consiguiendo generar hasta 80.000 empleos, con un valor añadido bruto cercano a los 6.000 millones de euros, es decir, tres veces más que actualmente.
En concreto, la terminal norte implicará una inversión de 1.400 millones de euros, 400 de ellos públicos y los 1.000 restantes privados, con un impacto económico considerable tanto en la fase de construcción como cuando empiece a funcionar.
La renovación de las instalaciones resulta en beneficios para la comunidad portuaria y para la propia Autoridad Portuaria, por ello el Puerto de Málaga sigue avanzando en el diseño de su nuevo puente de acceso sur por carretera a la compañía Proes Asesores. Se trata de un puente que se alzará sobre el río de Guadalmedina desde San Andrés.
