El efecto del coronavirus toca la puerta a la economía chilena, debido a que más de 1.500 contenedores con cerezas permanecen en un puerto de China y no han podido ser distribuidos a raíz de la emergencia por el virus, que ha causado cientos de muertes en ese país.
El Gobierno confirmó que a raíz de esta retención podría generarse una devaluación del producto.
Aunque cerca de mil contenedores con la cosecha proveniente de La Araucanía ya han comenzado a bajar desde la unidad portuaria, la cadena de producción se ha visto alterada por los efectos del coronavirus, ya que a raíz de esta emergencia, se decidió prolongar el receso hasta después del año nuevo chino.
El seremi de Agricultura en La Araucanía, Ricardo Senn, señaló que la afectación no sería muy considerable, ya que más del 80% de la producción anual está distribuida. “El precio no debiese mermar tanto, si bien 1.500 contenedores suena a un número bastante grande, es importante consignar que para efectos del mercado frutícola nacional el efecto no es tan duro, ya que el 80% de la cereza chilena ya estaba puesta en China”, explicó Senn en un comunicado.