Tras el reporte de los primeros casos de coronavirus en los puertos de Argentina especializados en envío harina y aceite de soja al mundo, se suscitó preocupación general.
Cofco International, Bunge Ltd. y la firma local Vicentín SAIC reportaron casos entre empleados en plantas del norte de Rosario, en el río Paraná, el lugar desde donde sale la mayoría de los embarques de harina de soja para piensos, aceite de soja para cocinar y biocombustibles.
De hecho, el país suramericano es el mayor exportador mundial de estos productos.
A raíz del contagio de 12 trabajadores, Cofco detuvo el trabajo en una planta trituradora de semillas oleaginosas y en una instalación portuaria. Le siguió Bunge, que se paró hace una semana después de que un empleado dio positivo. Y la planta de embotellado de Vicentín, en la misma zona, está temporalmente fuera de servicio después de informar un caso.
De acuerdo a fuentes locales, la planta Timbues de Cofco podría estar cerrada por una semana y la compañía está dirigiendo cargas a su terminal de Puerto General San Martín y a instalaciones administradas por otras compañías, según un portavoz.
