El Puerto de Baleares (España) modificará su sistema de reservas para el atraque de cruceros en 2022, un cambio que se enmarca dentro del Plan Estratégico, con un horizonte de cinco a diez años. En realidad, la gestión del tráfico de cruceros se ha convertido en uno de los grandes ejes de esta programación, en el que se están estableciendo las directrices marcadas por el Consejo de Administración.
En este punto, la Autoridad Portuaria también está determinando los criterios de sostenibilidad e integración con las estrategias turísticas para el tráfico de cruceros. Aunque son muchas las iniciativas del enclave balear y es el responsable de la administración de las instalaciones portuarias, su poder de gestión está limitado ya que es la administración competente la que marca las reglas de este producto turístico.
El cambio producido en el procedimiento de reservas de atraque ya no se confirmará automáticamente, sino que se esperarán los criterios que establezca al administración competente. En concreto, la prioridad del organismo portuario será seguir ofreciendo el mejor servicio al territorio y a sus usuarios. Estas medidas mejorarán la operativa portuaria, sobre todo si se tiene en cuenta que se prevé la constante presencia de dos cruceros durante la mayor parte del año 2022.
Otra preocupación para el sector marítimo es conseguir un combustible sostenible que les permita continuar con sus rutas marítimas. Al respecto, el operador UECC ha anunciado que realizará pruebas con un nuevo biocombustible marino de GoodFuels en el buque M/V Autosky durante un período de tres meses, es decir, entre marzo y mayo de este año.
